Un
viejo lobo de mar un día me dijo: “Que te busque después de tiempo, no
significa que quiera volver”.
A
David, su novia lo había cortado por otro cabrón. Cuando terminaron le puso
sobre la mesa un montón de excusas de esas que ya sabemos y que la verdad da un
poco de asco recordar. El tipo sin más ni menos se resignó y acató la decisión
de su hasta ese momento novia.
Pasaron
algunos meses desde la ruptura y hasta ese tiempo, David había hecho todo bien.
Bueno casi todo bien, porque al principio cometió algunos errores con su ex
novia, como tratar de convencerla, buscarla y pedir que “Hablaran”.
Pero
a partir de cierta fecha, se puso las pilas y mandó todo a la verga y
desapareció como se debe actuar. Meses después (como ya lo mencioné) le llega
un whatsapp de un número desconocido, obviamente era ella con el estúpido
pretexto “Que Hola, te extraño, no volví a saber nada de ti, ¿Cómo estás?...
que su pinche madre”.
Para
no hacerla más larga: Daniela le tira la onda y le propone verse, salir y
hablar de ellos.
¡Bingo!
La tengo comiendo de mi mano, -exclamó David.
Según
David, lo más seguro era que ella lo había extrañado y se suponía que venía la
tan anhelada reconciliación.
Se
llegó la fecha en que se verían, iban a ir al lugar que solían visitar cuando
estaban de novios y la noche pintaba perfecta. El wey se pegó un baño como de
40 minutos, se puso más shampoo del que usaba habitualmente, se puso aquella
camisa que se compró pensando “Ni modo, es una lástima que ella no me la vea
puesta”.
Veinte
minutos antes de la hora que se había fijado, él ya estaba haciéndose pendejo
caminando desesperadamente para poder hacer contacto con Daniela.
Y
sí, se encontraron nada más, como si nada.
Ella
lo saludó con cara de “Feliz cumple wey” y luego comenzaron los “¿Cómo has
estado?”, empezó a contarle un montón de pendejadas de fiestas con sus amigas,
del trabajo, de su familia etc. Pero David no era tonto, sabía que si lo había
buscado era por algo y no necesariamente para contarle de su trabajo, por lo
que decidió dar el primer paso.
La
volteó a ver con carita de ganador y lanzó un “Me extrañas”, pensando que le
estaba haciendo el favor a Daniela. Después hubo un momento de tensión en el
que ambos se quedaron sin palabras, hasta que Daniela sin más ni menos le
respondió a David:
-Mira
David, yo no quiero que te confundas.
-Yo
no me confundo Dani, la confundida fuiste tú.
-Sí
lo sé, y eso no cambió para nada, si te cité para vernos fue porque quería
saber que era de tu vida, saber cómo estabas, me gustaría que fuéramos amigos.
¡Cárgame
la verga! Decía mientras regresaba a su casa con cara de pendejo.
Hasta
aquellos días no entendíamos nada, seguíamos preguntándonos para qué carajos lo
había buscado, lo primero que se nos vino a la mente fue que tal vez estaba
tratando de jugar con él, David estaba confundido totalmente.
Después
de tiempo nos enteramos que la respuesta a todas las confusiones de David era
muy simple, Daniela quiso “Tantearlo”. Ella siempre supo que David seguía
enamorado, incluso cuando lo terminó tenía la seguridad de que él seguía
enganchado con ella. Pero cuando dejó de tener noticias de David, Dani ya no
estaba tan tranquila, ¿Estará de novio con otra? ¿Se estará olvidando de mí?
¿Ya no le importaré? Esas y otro tipo de preguntas típicas de una mujer
conchuda nivel maestría eran las que la tenían tan intrigada.
Y
obvio la opción más fácil de no seguir con la duda era indagar por sus propios
medios y de la forma más directa, lo llamó, le tiró la onda, le propuso salir y
lo mandó a la verga de nuevo.
Y
miren que mínimo Daniela fue clara con David, aunque no es excusa. Porque
también existe el tipo de mujer que cuando ya no te siente seguro y ella se
siente hasta un tanto olvidada y sin candidatos que reclutar, te buscan para
alguna estúpida salida y cuando te sienten seguro de nueva forma, se hacen las alzaditas
y cotizadas, enviándote directamente a la friendzone sin decir ni una sola
palabra.
Cuando
ellas proponen salir, ellas manejan la conversación, los gestos y las emociones
hasta que demostremos algo, esperando que lancemos un “Te quiero” o un “Te
extraño”, cuando esto sucede de nueva cuenta se sienten tranquilas y vuelven a
retomar su actitud de mujer deseada.
En
el caso de David lo ideal hubiese sido:
- Que al momento de leer el WhatsApp o lo hubiera borrado sin leerlo o hubiera atendido de una forma fría, distante y desinteresado para no darle mucho juego a Daniela.
- En dado caso de responder hubiera sido: “Mira Daniela la verdad es que estoy algo ocupado, yo te escribo la semana que viene o la que sigue y tal vez nos veamos” Y obvio no la próxima ni la siguiente le escribías. Si ella realmente le interesaría volvería a insistirte y te buscaría.
Entonces
ella confirmaría sus sospechas de que él estaría bien, que no estaba esperando
que lo buscara ni mucho menos estaba dependiente de seguir buscando la
posibilidad de regresar con Daniela.
Déjenme
decirles que las cosas son así en este negocio, las mujeres suelen aplicar
varias técnicas para tantear lo que está sucediendo con un hombre, digo hombre
porque no necesariamente puede ser un novio o ex novio, sino un simple mono al
que se quiere ligar o por el cual se sienten atraídas. El mensaje o e-mail en
blanco es un clásico del tanteo, muchos caen en la trampa y cuando reciben el
mensaje de la ex se vuelven locos a responderle y cuando eso pasa ellas nos
dicen: “No te envié nada, creo que fue un error”.
Lo
mismo pasa en whatsapp, escriben un montón de idioteces que no entiendes y
esperan que les respondas para decir: “Disculpa, eso era para un amigo”.
Esto
pasa habitualmente con las mujeres, muchas de las veces ni siquiera saben lo
que quieren pero en realidad solo buscan tantear a su objetivo. Si la pantalla
de tu celular dice “Daniela dice:” simplemente la dejamos en visto y a la
verga. Sus mensajes en blanco o llamadas perdidas no se responden, es como si
nada hubiese llegado.
Aprender
a identificar cuando una mujer te está tanteando no esta tan complicado, más si
no es la primera ni la última que te aplican. Si quiere que salgan y se vean
que le cueste, no demuestres mucho interés y que ella también ponga huevos si
de verdad le interesas y si no a chingar su madre, que no es ni la primera ni
la última.
¿Quiere
jugar? Vamos a ver si le gusta jugar a que no estás pendiente de ella.
4 comentarios:
Jejejejejjeje muy buen articulo jajaja me senti muy identificado
me encanto!!! eres la neta
muy identificada , se aplica para hombres también .
Me encanto tu consejo , yo no sabia que hacer porque por un lado pensaba no le contestare , pero no quiero ser descortés pero me lo ha hecho ya dos veces así que ya fue suficiente.
Muy bueno... y si por lo visto aplica a hombres también. El género es indistinto.
Gracias por compartirlo, nos refuerza a hacer lo que corresponde.
Saludos!
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